Don Mariano Contreras y Doña Ángela Martínez fueron los maestros, venidos de la sierra, que hace ya muchos años llegaron a Hontoria con la misión de educar a los hontorianos y hontorianas que cada día acudían puntualmente a su cita con la escuela.

En un principio, Don Mariano era el encargado de impartir clase a los chicos y Doña Ángela hacía lo mismo con las niñas hasta el traslado del maestro a Peñaranda, cuando Doña Ángela se quedó al frente de ambos grupos.

Cuando llegaron a Hontoria, Don Mariano y Doña Ángela ya se conocían, y en Hontoria vivieron algunos de los años más felices de su vida. Aquí vivieron su noviazgo y posterior matrimonio, así como el nacimiento de sus cuatro hijos: Ruth, Samuel, Rodolfo y Ricardo.

Como manda la tradición, los maestros habitaron en las denominadas “casas de los maestros” durante su estancia en el pueblo.

El recuerdo que Hontoria guarda de unos de los maestros que más generaciones educaron en el pueblo es altamente positivo y sin duda entrañable. Juntos planearon y llevaron a cabo mil y una actividades educativas que permitieron a todos los niños y jóvenes hontorianos conocer la vida fuera del pueblo, puesto que fueron muchas las excursiones que organizaron y las actividades de ocio que llevaron a cabo.

Además, marcaron un punto de inflexión en la educación, convirtiéndose en amigos protectores de sus pupilos a los que enseñaban con cariño y dedicación y sin gritos ni castigos.

Por todos estos motivos, Don Mariano y Doña Ángela son los pregoneros ideales para inaugurar nuestras fiestas patronales en honor a la Virgen de la Asunción y San Roque de este año 2007.